Nacido (29 de noviembre de 1912 – 8 de julio de 2008), John Templeton fue un inversor, banquero, gestor de fondos y filántropo estadounidense y británico.
John Templeton naciĂł en Winchester, Tennessee, en 1912. Para continuar su educaciĂłn universitaria, obtuvo una beca de una familia de bajos ingresos, pero era un buen estudiante.
Fue uno de los mejores estudiantes de economĂa en la Universidad de Yale. Se graduĂł en 1934, justo en medio de la DepresiĂłn. Master en Oxford dos años despuĂ©s. Cuando regresĂł a los Estados Unidos, trabajĂł en una empresa Fenner & Beane con sede en Nueva York, donde fue aprendiz.
John Templeton fue cofundador de una empresa conocida como Templeton, Dobbrow & Vance al final de la DepresiĂłn en 1937. Su empresa se convirtiĂł rápidamente en un valor de unos 300 millones de dĂłlares y, bajo su gestiĂłn, tenĂan 8 fondos mutuos. John Templeton fundĂł un fondo en las Bahamas en 1954. La antigua empresa cambiĂł el nombre poco antes de que Templeton vendiera su parte de la empresa en 1962.
Fue conocido por crear fondos exitosos durante su carrera. En 1992, el Grupo Franklin compró sus fondos. La reina Isabel II lo nombró caballero, ya que era ciudadano británico naturalizado, debido a sus grandes logros.
Su FundaciĂłn John Templeton es una de las fundaciones más reconocidas del mundo que dona la mayor parte de sus fondos a la investigaciĂłn cientĂfica.
Estilo comercial de John Templeton
Sus métodos de inversión fueron tallados por muchos durante el tiempo que estudió, como lo fue durante la Gran Depresión.
Buscaba comprar acciones de empresas de todo el mundo. Vio una oportunidad de lucrar adquiriendo muchas empresas pequeñas a bajo precio con una buena perspectiva a largo plazo.
Tuvo Ă©xito con acciones que otros inversores se molestarĂan en investigar. EncontrĂł esas empresas a travĂ©s de sus conexiones que se reunirĂan en su Lyford Key Club en las Bahamas, su casa, donde hablarĂa con ellos sobre ese tipo de empresas que nadie querrĂa ver en tĂ©rminos de inversiĂłn.
PreferĂa comunicarse con sus amigos y otros inversores en su propio terreno, literalmente el suyo, en una atmĂłsfera informal en su Lyford Key Club, en lugar de en Wall Street, donde todo era rápido y la informaciĂłn era demasiado formal, que … para Ă©l, significaba que la informaciĂłn no era exacta. Por lo tanto, crearĂa un ambiente atractivo para las personas que con gusto discutirĂan los asuntos con Ă©l. Vio a las personas como el poder de su investigaciĂłn.